Isa

Llegó sin apenas dormir para llenar el día de energía. Se cambió en un instante y comenzamos la sesión. En cada foto se deja el alma, en cada sonrisa el corazón, cautivando nuestro objetivo con cada mirada. Veis aquí una pequeña muestra de dos días detrás de la cámara, pero no es más que un pequeño avance de todas las instantáneas que se nos quedaron grabadas en el corazón.

Queríamos inaugurar con ellas una nueva etapa en la que cada trabajo, cada día que compartamos con vosotr@s, tenga un lugar en el que ser disfrutado por vosotr@s, por vuestr@s amig@s, por nosotros y por todo el que quiera asomarse a este balcón de recuerdos que confiamos, con vuestra ayuda, tenga un largo camino.

No podemos despedirnos sin dar las gracias a las personas que han colaborado en esta sesión:

Gracias Isa por esta bocanada de aire fresco que confiamos en no perder a lo largo de este nuevo camino, esperamos haber captado esa esencia tan especial que sólo tú tienes.

Gracias también a María por soportarnos durante esta sesión que también es tuya.

Y, en especial, gracias a Javier Piñeiro por ayudarnos a construir este nuevo sueño.